Se cagan en sus muertos y se abrazan cuando acaba el partido. Pero si te metes con el color de su piel, sea blanco negro, rojo o amarillo, quieren paralizar el mundo
A ver, antes de que se me tiren al cuello por este artículo de OPINIÓN los ‘borregos’ teledirigidos por esta sociedad para frikis, dejar claro que tengo menos de racista que la gran mayoría de la sociedad. Dicho ésto…
Hasta donde yo sé, el fútbol ha sido un deporte de mucho contacto e insultos de todo tipo. Un mundo de ‘vividores’ que genera miles y miles de millones donde los protagonistas son, en mayor parte, mercenarios que se venden al mejor postor.
Yo he visto, en directo, como un futbolista se cagaba en los muertos de otro…y cuando acababa el partido hasta se abrazaban. He visto insultos, patadas, puñetazos, escupitajos y barbaries de todo tipo…y una vez que finaliza el choque, pues abrazos, besos y a contarse unos a otros los millones que tienen en el banco y las famosas de turno que conocieron la semana pasada en las redes sociales.
Pues bien, esto sigue pasando cada día que hay fútbol. Lo vemos en televisión a diario. Se dicen de todo y se cambian la camiseta cuando acaba el partido. Pero ojo, como digas el asqueroso y repugnante insulto de moda…que se pare el fútbol, que se pare el mundo…que toca hacer campaña política.
Ayer, en el encuentro de Liga que midió a Cádiz y Valencia, parece ser que el jugador del equipo andaluz, Cala (pasado cartagenero), le dijo supuestamente “negro de mierda”, a Diakhaby.
Les puedo asegurar que en ese partido hubo insultos de todo tipo, pero como si nada…hasta que ocurrió tal suceso.
Bueno, los jugadores del Valencia querían ¡suspender el partido!…Se negaban a jugar. Te cagas en sus muertos y no pasa nada…pero como se escuche un insulto racista…todos a vestuarios a llorar. Pandilla de hipócritas.
Ahora ya saben lo que toca; manifestaciones, rodillas al suelo, manos al cielo y demás payasadas que no sirven de nada. Todo política y circo.
Los periodistas deportivos sin personalidad, que hay muchos, pondrán el grito en el cielo. Ya he visto más de un artículo que parecía que Cala había asesinado a alguien. Ojo, si dijo eso, es repugnante, pero igual de repugnante o más es que se caguen en tu madre o en tus muertos, ¿no? DIGO YO.
Por desgracia, la prensa deportiva española, bastante pobre, le va a dar más publicidad a este insulto de niñato paleto que a la salvajada que ocurrió en Bilbao antes de la Copa del Rey, donde los etarras camuflados de seguidores del Athletic destrozaron parte de la ciudad y no hubo detenciones.
Un consejo a estos periodistas; dedíquense a hablar del tiqui-taca y poco más. Hagan un favor a la sociedad que todavía piensa por sí misma y no escriban de otra cosa.
Si ya el fútbol de hoy en día es patético, con el VAR y aburrido, con tácticas de juego que son de todo menos fútbol (yo te paso a tí y tú a mí y yo a tí y tú a mí…) ahora resulta que hay que ser mudos…o me chivo al árbitro.
Y otro consejo a Diakhaby ( a todos los futbolistas); si te dice negro de mierda, pues tú lo llamas blanco de mierda. Si te llaman gordo, pues tú flaco, si te llaman maricón…pues tú hombretón…y si se cagan en tú madre, pues tú en su padre…pero juega al fútbol, que para eso te pagan y muy bien.
Y si no aguantas los insultos, pues no juegues al fútbol. El mundo no se puede paralizar porque te llamen negro de mierda. Hay que paralizarlo por el abuso a menores, por el hambre, por el paro, por el maltrato a mujeres y a HOMBRES, por la okupación, por el Bullying, por el cáncer, por el terrorismo, por la corrupción política…pero por eso no.
Para terminar repito, aquel que me llame racista por este artículo, es que no tiene ni medio dedo de frente.