Ni árbol ni Belén. Dos bolas gigantes con luces y música
Línea comunista de imponer lo pagano.
Ribó sigue su camino marcado para fulminar la Navidad. Este año Valencia tendrá unas fiestas familiares que más bien parecerán unas Fallas navideñas. No habrá árbol, tampoco Belén y en su lugar dos bolas gigantes absurdas con luces y música.
La Navidad llega a Valencia pero lo hace a trozos. Ayer era el día del encendido de la plaza del Ayuntamiento, pero fue un fracaso, nunca mejor dicho, a todas luces.
Un Ayuntamiento sin luces, tristón y, sobre todo, NADA de árbol de Navidad. Nada de Belén. En su lugar, dos bolas gigantes con luces y música. Bolas multicolores que interactúan entre sí y que pueden ser visitadas por dentro. Con mensajes navideños, como no, en diversos idiomas, por eso de la multiculturalidad y demás chorradas. VERGONZOSO.
“Creemos que estamos en una cultura en la que se ha aceptado algo que viene del norte, como es el árbol. Pero estas dos esferas puede ser una idea interesante para la gente”, señaló Ribó.
Poco hay más que añadir. Bueno sí, las cosas tradicionales navideñas han ido a parar muy lejos en la ciudad de Valencia. En las calles y plazas marginadas. Donde nadie lo ve. Ya saben, por eso de dar un imagen pública progre y moderna donde los valores tradicionales y entrañables no tienen cabida.