Acompañada de familiares, políticos y numerosos vecinos de la trimilenaria
Era su última voluntad y, aunque nuestro ‘querido’ Obispado a puesta más de una traba, Pepita como era conocida, Josefa Muñoz cumplió su última voluntad y se despidió de su Cartagena en las ruinas de la Catedral Vieja, esa por la que tantos años ha luchado.
Pepita, comerciante de dilatada trayectoria y presidenta de la Plataforma Virgen de la Caridad, entre muchas cosas, falleció el pasado domingo a los 79 años de edad. Nombrada ‘Cartagenera del Año’ en 2020, luchó hasta la saciedad por nuestra querida ciudad. Mención especial tiene nuestra Catedral vieja, pura historia de España marginada y repudiada por el Obispado y aquellos políticos que les importa bien poco lo ‘bueno y con solera’ que tiene la trimilenaria.
Por todo ello, Pepita, como era conocida, quería despedirse de los cartageneros en su catedral…y así fue.
Acompañada de familiares, políticos y numerosos vecinos de la ciudad, fue llevada desde Santa María hasta ‘la vieja’ y una vez allí el cura de Vista Alegre, Antonio Bermejo, ofició la Eucaristía en la capilla del Concejo. Una vez terminada ésta, una rondalla interpretó ‘La flor marina’ en su honor.
Se va una de las grandes de este ciudad. De las pocas personas que ha luchado de verdad contra las injusticias a la que está sometida Cartagena. Pero la lucha para acabar contra el ‘cáncer’ que somete a la trimilenaria acaba de comenzar y todos aquellos que lucharon al lado de Josefa Muñoz seguirán el camino.
