Los inmigrantes, de 19 y 20 años, se habían trasladado a Zaragoza para apoyar al personal de la fundación
Progres, podemitas y demás bultos de la sociedad española…¿cuándo vais abrir los ojos? Se lo dais todo y así os lo pagan…
Dos marroquíes, de 19 y 20 años, violaron presuntamente en la madrugada del 7 de octubre a una mujer en Zaragoza. Hasta ahí es el pan de cada día, pero lo mejor viene ahora.
Resulta que estos dos inmigrantes trabajaban para una fundación (SAMU) que ayuda a esta escoria de la sociedad y la víctima era una compañera de trabajo. ALUCINANTE.
La presunta agresión sexual se produjo tras una cena de trabajo en Zaragoza, lugar al que se desplazó uno de los agresores para apoyar a los miembros de la fundación…vaya apoyo…
Una vez terminada la cena (por cierto, ¿cuánto gasto no? desplazamientos, hospedaje, cenas, vehículo…menudo circo de fundaciones para apoyar a los menas mientras los españoles se pudren), el marroquí acompañó a la futura víctima y otra trabajadora a su casa en un vehículo de la fundación.
A eso de la una de la mañana, la amiga de la víctima llegó a su destino y quedaron los dos solos en el vehículo. Una vez iniciado el nuevo trayecto para llevar a la mujer a su destino, el individuo en cuestión se desvió del trayecto para recoger a un amigo.
Éste se sentó en la parte trasera del coche y nada más subirse comenzó a pellizcar el cuerpo de la mujer, que sorprendida vio como al mismo tiempo su compañero de trabajó empezó a manosear sus partes íntimas.
Al llegar a Utebo, el joven animal que ocupaba la parte trasera del vehículo abandonó el auto, momento que aprovechó el otro marroquí para violar a su compañera de trabajo.
Fueron casi dos horas de auténtico calvario hasta que la mujer consiguió escapar y llamar a una amiga mientras se escondía de su agresor. Ésta, a su vez, llamó a las autoridades.
Una vez acudió la Guardia Civil, la víctima fue trasladada al hospital y comenzó así el papeleo para identificar a los autores de tal brutal acto.
Horas después los dos inmigrantes fueron detenidos, uno como autor de los hechos y otro como cómplice.
Pero tranquilos progres, que ya están puestos en libertad. Sólo 24 horas después fueron puestos de patitas en la calle, a pesar de que en el informe policial queda bien claro la palabra VIOLACIÓN.
¿Qué hacemos con este caso femipodemitas? ¿A Quién culpamos? ¿Españoles, blancos y heteros son los culpables?
Menuda pandilla de caraduras. Menudo negocio el de las fundaciones para ayudar a los supuestos desfavorecidos.
Hay mucha gente que necesita ayuda y no esta escoria. Ahora vuelvan a darles trabajo. Vuelvan a decir que son sus niños. Ya saben donde se pueden meter a estos animales.
A ver qué piensa ahora esa trabajadora por el bien de los ‘desfavorecidos’, después de ser violada salvajemente por uno de ellos, que para más inri trabajaba en su fundación.
