Marroquíes y españoles que han ocupado una vivienda en la calle Santa Obdulia
Desesperados. Así se encuentran muchos vecinos de La Unión. En realidad, la mayor parte de los ciudadanos de este municipio de la CARM se sienten abandonados porque su ciudad se ha convertido en un campo de batalla lleno de delincuentes mientras los máximos responsables miran para otro lado.
Ahora han sido un grupo de ciudadanos los que a través de las redes sociales han denunciado la pesadilla que viven a diario con unos okupas. Concretamente, en la calle Santa Obdulia.
Marroquíes, españoles…hay de todo metidos en una vivienda propiedad de una entidad bancaria. Una vivienda que se ha convertido en un infierno para los vecinos de la zona.
Peleas continuas y difícil salir a la calle, ya que hay tres perros de presa propiedad de los okupas que han atacado a más de un vecino.
La calle está llena de basura porque estos okupas no se preocupan de tirar su ‘mierda’ a los contenedores. Lo tiran todo a la calle. Un estercolero.
Además, hay un continuo tráfico de personas por la vivienda ocupada, por lo que se cree que es un sitio de menudeo.
“No podemos salir a la calle por miedo a las peleas y a los perros. Se llama a la policía y no hacen absolutamente nada. Hasta que no pase una desgracia no se tomarán medidas. Estos mismo okupas ya cometieron serios altercados hace tiempo”, señaló un vecino.
¿Cuándo actuará la policía? ¿Y el concejal de Seguridad?
No se puede permitir que estos delincuentes actúen con total impunidad mientras tienen atemorizados a toda una comunidad de vecinos.
Es hora de dar un paso al frente y exigir que se tomen medidas par poder echar a esta lacra de la sociedad. Tal vez, si no actúan las autoridades, sean los propios vecinos los que planeen tomar medidas.
Muchos ya han pedido auxilio a diferentes partidos políticos, como ‘Defiende La Unión’, a los que les han mandado cientos de correos informando de lo que sucede en esa calle de Santa Obdulia.
Un ejemplo más de la libertad que tienen en este país los delincuentes. Un ejemplo más de la inutilidad de nuestros políticos, que sólo se preocupan por llenarse sus bolsillos con la compra fácil de votos.