jueves, marzo 28, 2024

La Junta de Gobierno aprueba la segunda fase de rehabilitación del Fuerte de Despeñaperros

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El presupuesto de licitación son 150.000 euros

La Junta de Gobierno, presidida por el teniente de alcalde, Manuela Padín,  ha autorizado este jueves 6 de octubre el proyecto básico de ejecución, consolidación y recuperación de los tramos de cortina correspondientes a los ángulos noreste y sureste del Fuerte de Despeñaperros.

“Una vez que la Junta de Gobierno ha aprobado la segunda fase de las obras de rehabilitación del Fuerte, saldrán a licitación en breve para que se puedan poner en marcha lo antes posible y continuar de esta forma con el Plan Director que se aprobó el pasado año. El presupuesto de licitación son 150.000 euros y el plazo de ejecución es de tres meses”, ha destacado la vicealcaldesa y concejala de Patrimonio Arqueológico, Ana Belén Castejón.

La principal actuación se centrará en los muros correspondientes a la parte sur del Fuerte, conservados frente a la fachada lateral del antiguo Cuartel de Antigones ya que, debido a la erosión y al paso del tiempo, están parcialmente derrumbados.

“Este proyecto se centra en la intervención de los lienzos de muro que se consideran principales del monumento y que son los que mejor se observan desde la ciudad. También se va a llevar a cabo el refuerzo estructural de algunos tramos para reponer su alzado hasta la base de la plataforma artillera. En algunos lugares será necesario realizar una reconstrucción importante de mampostería, tratando de recuperar y reutilizar el material original siempre que sea posible”, ha explicado Ana Belén Castejón.

El proyecto, que ha sido redactado por los arquitectos José y Alberto Amorós Martínez, también incluye la limpieza de la plataforma artillera, la retirada de la vegetación y la aplicación de un tratamiento superficial que evite el crecimiento de nuevas plantas que pueden perjudicar a la conservación y contemplación del monumento.

De igual modo, se ha previsto la reposición de la hilada de ladrillo macizo con los canalones para la evacuación del agua de lluvia. Esta última hilada servirá de base para la reposición en futuros proyectos, una vez recuperada la unidad monumental del Caballero, del cordón sobre el que se alzaría el parapeto y los merlones.

Paralelamente, se irán realizando todos los estudios arqueológicos y de restauración necesarios que permitan conocer la génesis del edificio, así como la posibilidad de identificación de restos anteriores a su construcción; las patologías que han afectado a su conservación, acompañadas de las analíticas necesarias que permitan la identificación de aquellos elementos que se consideren de interés para su restauración, así como los estudios geológicos pertinentes ya que la construcción se alza sobre un peñón rocoso de claro interés para conocer la naturaleza geológica del marco urbano.

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