El portavoz del grupo en Cartagena, Gonzalo Abad, vuelve a ser afiliado pero parece ser que Vox se niega a reconocer los derechos que le corresponden como concejal y máximo representante en la trimilenaria
Gonzalo Abad, portavoz del Grupo Municipal de Vox en Cartagena, no debe de estar muy contento con sus compañeros que digamos. Y es que el partido se niega a acatar, supuestamente, las resoluciones judiciales.
Hace ya cerca de un año, el Juzgado de Primera Instancia 5 de Cartagena anuló la expulsión de Vox del concejal de Cartagena Gonzalo Abad y obligó al partido a readmitirlo, pues vulneró el derecho fundamental de asociación al apartarlo de sus filas en 2021. En consecuencia, el partido comandado por Santiago Abascal debía de reconocer al demandante como afiliado de pleno derecho, dejando sin efecto las resoluciones del Comité de Garantías de 23 de diciembre de 2020, 16 de enero de 2021 y 29 de enero de 2021.
Pues bien, no contento con ello, Vox recurrió y el pasado mes de noviembre la Audiencia Provincial de Murcia ratificó la nulidad del proceso de expulsión de Vox del concejal de Cartagena Gonzalo Abad Muñoz, rechazando así el recurso de la formación de Abascal y condenándola al pago de las costas.
Gonzalo Abad vuelve a ser afiliado de Vox sí, pagando su cuota claro está, pero no puede trabajar como es debido, ya que, supuestamente, Vox no reconoce los derechos de Abad como concejal de Vox (en igualdad de condiciones que el resto de concejales).
El concejal del Grupo Municipal en Cartagena no está incluido en los grupos de trabajo de Vox. Grupos en redes sociales donde se elaboran mociones, instrucciones del partido, coordinación…en las que Abad no aparece, y eso que se solicitó su unión en el mes de mayo de 2022.
Curioso la verdad, que la figura más representativa del partido en Cartagena no esté integrado en ningún grupo de trabajo. Es más, Abad sigue bloqueado en el Twitter de Vox Murcia…
Estos hechos ponen de manifiesto la poca relación que existe con el partido desde Cartagena, a pesar de que Abad en más de una ocasión ha tendido un puente para limar asperezas. Mucha insistencia para nada.
Las sentencias en firme dan la razón al portavoz del grupo en Cartagena, que debe ser readmitido de pleno derecho. No obstante, no cuenta para nada en los intereses del partido comandado por Abascal. No aparece en los grupos, ni en las mociones, ni en las iniciativas…por el simple hecho de que no existe comunicación a pesar de que es la figura representativa del partido en la trimilenaria.
Por poner más ejemplos de esta ruptura total de Vox con Cartagena, destacar que el grupo desde Murcia organiza reuniones con los vocales vecinales y no se convoca a los coordinadores de la trimilenaria (ni reunión alguna, ni convocatorias con sus vocales vecinales… ni por parte de Murcia, ni por parte del nuevo coordinador en Cartagena ‘impuesto’ desde Murcia, Diego Salinas). Tampoco hubo unificación de criterios a la hora de posicionarse sobre el escándalo que ha salpicado de lleno al PP en lo que se refiere a la trama de presunta corrupción en la Autoridad Portuaria.
La verdad es que no son cosas lógicas dentro de un partido político. No hay coordinación. Cero comunicación. En definitiva, Vox no sabe reconocer sus errores…ni cumplir las sentencias judiciales visto lo visto.
¿Qué tiene Vox que esconder? ¿A qué le tiene miedo? ¿Por qué quiere silenciar a Abad? ¿Qué quiere que no diga el portavoz del partido en Cartagena en ese grupo de trabajo?…un grupo tal vez, que mengua con el paso de los días por la cantidad de concejales de Vox en la CARM que han sido cesados o han dimitido por distintas causas en los últimos meses…
