Este diario no se va a dejar manipular y no va a rectificar ni una coma del artículo de ayer sobre que un grupo de sanitarios tiene que donar dos euros si quiere disponer de EPIS
De verdad, sabíamos que el artículo de ayer iba a tener mucha repercusión. Estas noticias hacen daño a los caraduras que se aprovechan, pero no esperábamos que, lamentablemente, fuésemos centro de la ira de un amplio sector dentro del hospital. El sector dañado claro está, que se ha dedicado, desde que se publicó la noticia a amenazar y coaccionar a cuartaedicion.com, al redactor de los hechos y a las fuentes que informaron de la vergonzosa manera de actuar de ciertos responsables del centro hospitalario del Rosell.
Antes de nada, dejar claro que la dirección de dicho hospital no tenía conocimiento alguno, que sepamos, de los tejemanejes que llevan a cabo ciertos trabajadores dentro del hospital. Este periódico no atacó al Rosell. Informó, según fuentes y siempre supuestamente, de los ‘trapicheos’ vergonzosos que llevan a cabo algunos empleados del centro. Dicho esto…
Ahora no vamos a decir supuestamente. Ahora vamos a atacar con todas las de la ley. Nadie va a amenazar y coaccionar a un periodista y su medio por contar verdades como puños. Y menos aún a las fuentes, de la que a partir de ahora no vamos a mencionar más por su seguridad laboral.
Tras la publicación de la noticia de las supuestas donaciones para conseguir EPIS en el Rosell, rápidamente se buscaron culpables. ¿Por qué han atacado a ciertas personas si no se revelaron identidades en ningún momento? ¿por qué se dio orden inmediata de eliminar la publicación de cuartaedicion.com de ciertos grupos sanitarios? Y, sobre todo, ¿por qué los que amenazan y critican brutalmente a este medio son todos del mismo servicio del hospital? En la noticia de ayer en ningún momento se habló de, por poner ejemplos, pediatría, urgencias, UCI, medicina interna, quirófano…pero, casualmente, todos nuestros queridos retractores pertenecen al mismo sector…mucha casualidad, ¿no?
Esto demuestra que la noticia ha hecho que a más de uno se le haga un pequeño nudo en el estómago. Pero que no se preocupen. Por desgracia, este periódico ha sido informado de que Dirección del Rosell ya está tomando medidas, pero NO contra los responsables de tales fechorías. Van a tomar medidas contra todos los que filtraron información a este diario.
Ahora resulta que sí se recogía dinero, pero no era para ‘donaciones’ a la empresa que dio el material…era para otros asuntos que no podemos mencionar. Cambio de versiones (en menos de 24 horas) y mismas mentiras, lo que demuestra la veracidad de la noticia.
Lamentable decisión de la Dirección del hospital
cuartaedicion.com ha sido informado de que todos los sanitarios del sector involucrado en las supuestas donaciones tendrán que subir uno a uno a rendir cuentas. Pero no, repetimos, para buscar a los culpables de jugar con el dinero y la seguridad de los trabajadores. Subirán para ver quiénes son los responsables de contar las ‘chapuzas’ que llevan a cabo sus…compañeros.
Es decir, este periódico revela una grave irregularidad dentro de un centro sanitario y los máximos responsables en vez de juzgar a los culpables, se centran en buscar a los que filtraron la información. Lamentable.
No obstante, no es el primer caso. Desde que el coronavirus aterrizó en España, la gran mayoría de sanitarios están siendo amenazados con duras sanciones si filtran información comprometida a los medios de comunicación. Manipulación en toda regla.
Dicho todo, este diario da el tema por zanjado, ya que ha conseguido su objetivo; informar de un vergonzoso hecho que se está llevando a cabo. El problema es que la Dirección del hospital no va a tomar medidas, ojalá nos equivoquemos, contra los culpables. Va a centrar su ira en recriminar a los que contaron la verdad de lo que se cuece de puertas para dentro.
Al menos, es de esperar que se le de un toque de atención a estos personajes que hacen y deshacen dentro de su servicio de trabajo. Que se creen los jefes y manejan a sus compañeros sólo por interés propio. Que cometen irregularidades por doquier a sabiendas que están respaldados por la cúpula, ya sea por enchufe, amiguismo o vete tú a saber.
Por cierto, este periódico no va a tolerar que se le amenace con supuestas denuncias. Jamás cuartaedicion.com va a mentir o soltar bulos sobre centros hospitalarios, ya que admiramos la labor que se lleva a cabo en sanidad pública, más aún con los tiempos que corren, donde se han convertido en nuestra principal arma para luchar contra el coronavirus.
Daniel Negroles, servidor que firma la noticia, ya fue amenazado en su día cuando trabajaba para la Tribuna de Cartagena con el gran periodista y mejor amigo Josele Sánchez, por informar en exclusiva sobre el centro de inmigrantes que iba a ir ubicado en el antiguo Hospital Naval, que resultó ser verdad.
Como también resultó ser cierto la información dada por este periodista sobre la falta de Hemodinámica en Cartagena, que luego fue noticia en todos los periódicos regionales, o el paciente que murió en un pasillo del hospital Santa Lucía en plena crisis por la Gripe A y nadie se dio cuenta, y que fue noticia a nivel nacional. También fue juzgado por sacar a la luz las carencias de un médico del hospital Rafael Méndez de Lorca, información que costó la suspensión de empleo y sueldo a dicho médico.
Así que se dejen de amenazas y tonterías, que me burlo de ellas, por no decir otra cosa. Es más, seguiré destapando trapos sucios de todo trabajo al servicio público, porque tengo para dar y regalar ya que este diario no está subvencionado por el Gobierno.