El asesino, un alumno de 14 años del centro que disparó contra sus compañeros con una pistola de su padre
Nueve personas han muerto y varias resultaron heridas en una escuela de Belgrado cuando un joven de 14 años, alumno de esa institución, disparó esta mañana con una pistola contra sus compañeros y contra el personal docente y de seguridad.
Según las primeras informaciones oficiales, hay un total de nueve muertos, ocho de ellos menores de edad, y un adulto del equipo de seguridad de la institución.
Un escolar abrió fuego contra estudiantes y guardias de seguridad en una escuela de Belgrado este miércoles, dijo la policía serbia, que añadió que había detenido a un sospechoso.
Entró y disparó a todo aquel que se cruzaba en su camino, llevando el caos al centro escolar. Se produjeron varios disparos y varias personas resultaron heridas, dijo inicialmente la policía en un comunicado. El sospechoso es un estudiante de séptimo curso.
Las autoridades ya están investigando el porqué de esta terrible matanza. Según cuentan alumnos del centro, el día anterior, el principal sospechoso acudió a una fiesta de cumpleaños y lo hizo con total normalidad. Era un buen estudiante y lo llamaban “el empollón”, aunque no era un adolescente marginado.
“Vi a niños salir corriendo de la escuela, gritando. Vinieron los padres, estaban aterrorizados. Después oí tres disparos”, declaró a la televisión estatal RTS una chica que asiste a un instituto adyacente al Vladislav Ribnikar.
Una matanza típica de Estados Unidos pero muy poco común en Serbia, donde hay leyes muy estrictas en lo que a posesión de armas se refiere.
El problema es que los Balcanes occidentales están inundados de cientos de miles de armas ilegales tras las guerras y los disturbios de la década de 1990. Un negocio sucio que ha salpicado a los de siempre, los más pequeños.