Artículo de opinión de Carlos León Roch
Este martes, a las 8 pm. se ha oficiado en la madrileña iglesia de Santa Bárbara un funeral por el alma de Federico Sánchez Aguilar, mi llorado amigo e inolvidable Jefe de las Falanges Universitarias de Madrid, en el acogedor “Hogar” de Barquillo 44; en aquellos estudiantiles y felices años sesenta.
Habría estado allí si las circunstancias me hubieran permitido viajar. Habría abrazado a Mari carmen, su ESPOSA ( así, con mayúsculas). Habría llevado mi Camisa Azul y cantado el “Cara al Sol”, con los camaradas que estuvieran.
Pero ,afortunadamente, el Catolicismo es eso, universal, y la Misa que se ofició en la iglesia de Santa María de Gracia, en mi Cartagena de Levante, fue aplicada también por su alma. Y me sentí como si estuviera en un banco de la de Santa Bárbara, detrás de Mari Carmen, y frente al Santísimo. Y recordando…
Inolvidables Eucaristías en Santa Bárbara ( y en la Iglesia de San José) en las ”fechas características”, o con reclamaciones hispanas, como cuando Panamá exigió la propiedad de “su”canal…O, incluso, escuchando a un franciscano tocar brillantemente al órgano “Giovinessa”, en una Eucaristía en aniversario del asesinato de Benito Mussolini…
Sí, ya me imagino que en el funeral de Santa Bárbara habrán asistido otros muchos amigos y compañeros de Federico…Las gentes del mundo de la Radio y Televisión ; los de los Toros; los de la Zarzuela; los de Cartagena ( ¡la americana, la de Indías!), a la que estaba tan vinculado…y Filipinas.
Porque Federico era el Comentador de la Orden Filipina de Rizal, en justo homenaje a ese médico hispano-filipino estúpida e injustamente fusilado cuando sólo quería que “su patria chica fuera una provincia más de España. Sus textos sobre ”Hispanoasia” nos vinculó a muchos, ya para siempre.…
Que Dios te de su eterno descanso y a nosotros nos lo niegue…