Escaso personal y dos años sin mesa de negociación
Los bomberos de la CARM estallan. Decenas de ellos se han encerrado en la sede del Consorcio de Extinción de Incendios y Salvamento (CEIS) en señal de protesta por la falta de medios que llevan sufriendo hace años y que se ha agravado con la llegada del coronavirus.
Falta de personal y que llevan dos años sin mesa de negociación son motivos más que suficientes para pedir la dimisión del consejero de Transparencia, Seguridad y Emergencias, Antonio Sánchez Lorente, y del director técnico del Consorcio, Antonio Codina.
Falta de personal (casi un centenar) que se ha visto aumentado por las bajas a consecuencia del coronavirus y que hace que el trabajo no se pueda llevar a cabo de la mejor manera, poniendo en serio peligro la seguridad a la hora de tener que actuar. Guardias con pocos efectivos que complican y mucho el trabajo si se produjese un incendio de importancia.
Pero ojo, los bomberos no están en cuadro sólo por las bajas por culpa del coronavirus. Están en cuadro por la mala gestión a la hora de gestionar un servicio de emergencias.
Actualmente, el Consorcio cuenta con 330 bomberos. Cada día hay 70 de guardia.
